«Una manzana al día mantiene alejado al médico». El refrán es cierto porque las manzanas son excepcionalmente saludables con una larga lista de beneficios para la salud.
Desde ser bajas en calorías, ayudar a la pérdida de peso, reducir el riesgo de diabetes hasta proteger el corazón, las manzanas son una de las frutas más populares.
Pero ¿sabía que esta humilde fruta puede ser beneficiosa para dos condiciones de salud bastante opuestas: la diarrea y el estreñimiento? Sí, ha leído bien. Consumir manzana de diferentes maneras puede ser beneficioso tanto para las personas que sufren de estreñimiento como de diarrea.
Las manzanas están compuestas por fibra soluble e insoluble. Tienen un 64 por ciento de fibra insoluble y un 32 por ciento de fibra soluble.
Diarrea – tomar sin piel
La fibra soluble es la que forma una consistencia gelatinosa en las heces y ralentiza la digestión, por lo que es buena para las personas que tienen movimientos sueltos. La fibra soluble se encuentra en la parte interior de la manzana, que es la pulpa y la carne. Por lo tanto, si tiene diarrea, la mejor forma de consumir la manzana sería sin la piel.
Estreñimiento – tomar con piel
La fibra insoluble aumenta el volumen de las heces y ayuda a que pasen rápidamente por el intestino. Esto hace que la manzana sea buena para las personas que tienen estreñimiento. La fibra insoluble se encuentra en la piel de la manzana, por lo que la mejor forma de consumir manzanas cuando se tiene estreñimiento es con la piel.
Un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition descubrió que las mujeres que comían manzanas con regularidad tenían entre un 13 y un 22 por ciento menos de problemas de estreñimiento que las que no las tomaban.
Los expertos también creen …
Las manzanas están cargadas de fibra de pectina, que tiene una acción anfótera. Paradójicamente, puede aliviar tanto el estreñimiento como la diarrea, según la necesidad del organismo.
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