La retina representa una parte del sistema nervioso central (SNC). Tras modificar la señal neuronal, el axón de la última neurona entra en el nervio óptico y sale del ojo. En la mayoría de los casos de enfermedades de la retina que conducen a la pérdida de visión, el diagnóstico lo realiza un oftalmólogo tras examinar el fondo de ojo. Sin embargo, algunos trastornos de la retina pueden no ser detectables en el momento del examen. Esos pacientes serán remitidos a un neurólogo por «pérdida visual inexplicable» cuando se sospeche una lesión detrás del nervio óptico. Además, el conocimiento de las posibles anomalías de la retina es útil para el neurólogo cuando atiende a pacientes con enfermedades del SNC, que pueden manifestarse también en la retina. El objetivo de este capítulo es ofrecer una visión general sobre los trastornos de la retina que no causan ninguna o pocas anomalías retinianas, los asociados a enfermedades neurológicas, así como las enfermedades retinianas más importantes que afectan a los tejidos del fondo de ojo (cuerpo vítreo, retina, epitelio pigmentario y coroides). Se describen las técnicas de examen y las herramientas de diagnóstico más utilizadas. Se discuten los tumores, las enfermedades vasculares, especialmente la retinopatía diabética, la degeneración macular asociada a la edad, los trastornos inflamatorios y tóxicos coriorretinianos, las retinopatías paraneoplásicas, las distrofias hereditarias de la retina y la afectación de la retina en enfermedades del SNC, como las facomatosis y la esclerosis múltiple.
Categorías: Articles
0 comentarios