Pregunta: «¿Qué significa no apoyarse en su propio entendimiento (Proverbios 3:5)?»
Respuesta: Proverbios 3:5-6 es un pasaje conocido por muchos: «Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia inteligencia. En todos tus caminos reconócelo, y él dirigirá tus sendas». El versículo 5 es un par de mandatos complementarios. Se nos dice, positivamente, que confiemos en el Señor y, negativamente, que no confiemos en nuestro propio entendimiento. Estas dos cosas se excluyen mutuamente. En otras palabras, si confiamos en el Señor, no podemos depender también de nuestra propia capacidad para entender todo lo que Dios está haciendo.
Primera de Corintios 13:12 dice: «Porque ahora vemos en un espejo débilmente, pero entonces cara a cara. Ahora conozco en parte; entonces conoceré plenamente, como he sido plenamente conocido». Sólo vemos una parte del cuadro que Dios está pintando. Si queremos confiar de verdad en Él, tenemos que dejar de lado nuestro orgullo, nuestros programas y nuestros planes. Ni siquiera los planes humanos mejor trazados pueden acercarse a la magnífica sagacidad del plan de Dios. «Porque la locura de Dios es más sabia que la sabiduría humana» (1 Corintios 1:25).
La mayoría de nosotros tiene un deseo desesperado de entender, pero en muchas áreas debemos reconocer que no podemos entender. Debemos aprobar los caminos de Dios, incluso cuando no podemos comprenderlos. Isaías 55:8-9 nos dice por qué a menudo no entendemos lo que Dios está haciendo: «‘Porque mis pensamientos no son los vuestros, ni vuestros caminos son los míos’, declara el Señor. Porque como los cielos son más altos que la tierra, así mis caminos son más altos que vuestros caminos y mis pensamientos más que vuestros pensamientos». Dios ve todo el panorama, mientras que nosotros sólo vemos nuestro pequeño rincón. Confiar en el Señor con todo nuestro corazón significa que no podemos anteponer nuestro derecho a entender por encima de su derecho a dirigir nuestras vidas de la manera que Él considere oportuna. Cuando insistimos en que Dios siempre tenga sentido para nuestras mentes finitas, nos estamos preparando para un problema espiritual.
Nuestra comprensión limitada puede llevarnos fácilmente por el mal camino. Proverbios 16:25 dice: «Hay un camino que parece correcto, pero al final conduce a la muerte». Cuando elegimos dirigir nuestras vidas según lo que nos parece correcto, a menudo cosechamos desastres (Jueces 21:25). Cada cultura ha intentado que Dios apruebe su definición de lo correcto y lo incorrecto, pero Dios nunca cambia y Sus normas nunca cambian (Números 23:19; Santiago 1:17; Romanos 11:29). Cada persona debe tomar la decisión de vivir su vida según sus preferencias personales o según la inmutable Palabra de Dios. A menudo no entenderemos cómo Dios hace que «todas las cosas cooperen para el bien» (Romanos 8:28), pero cuando confiamos en Él con todo nuestro corazón, sabemos que lo hace. Él nunca nos fallará (Salmo 119:142; Filipenses 2:13).
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