El saldo de dinero que se debe a una empresa por bienes o servicios proporcionados o utilizados pero que aún no han sido pagados por los clientes se conoce como cuentas por cobrar. Se trata de bienes y servicios entregados por una empresa a crédito a su cliente con el entendimiento de que el pago llegará en una fecha posterior.
Las cuentas por cobrar son las facturas pendientes que tiene una empresa o el dinero que le debe el cliente. El término se refiere a las cuentas que una empresa tiene derecho a recibir a causa de los bienes y servicios entregados.
Las cuentas por cobrar representan una línea de crédito ampliada de una empresa a un cliente que requiere pagos debidos en un período de tiempo relativamente corto, que va desde unos pocos días hasta un año fiscal.
La mayoría de las empresas permiten que una parte de sus ventas sean a crédito. A menudo, una empresa ofrece este crédito a clientes frecuentes o especiales que reciben facturas periódicas. Esto permite a los clientes evitar tener que hacer pagos a medida que se produce cada transacción. Otras empresas ofrecen habitualmente a todos sus clientes la posibilidad de pagar después de recibir el servicio. Una compañía eléctrica es un ejemplo de empresa con cuentas por cobrar. Proporcionan electricidad a un espacio y esperan el pago de sus clientes. Las facturas impagadas forman parte de las cuentas por cobrar.
En este artículo también hablaremos de:
¿Qué tipo de cuenta es la de cuentas por cobrar?
¿Cuáles son los ejemplos de cuentas por cobrar?
¿Cuál es el asiento para las cuentas por cobrar?
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¿Qué tipo de cuenta es la de cuentas por cobrar?
La cantidad de dinero que se debe a un negocio de su cliente por un bien o servicios prestados es cuentas por cobrar. Las cuentas por cobrar se registran en su balance como un activo corriente, lo que implica que el saldo de la cuenta es pagadero por el deudor en un año o menos.
Si la cuenta tarda más de un año en convertirse en efectivo, se registra como un activo a largo plazo o un documento por cobrar en el balance. Según el principio de devengo, la cuenta se compensa con una provisión para cuentas de dudoso cobro, ya que existe la posibilidad de que algunas cuentas por cobrar nunca se cobren. Esta provisión es una estimación del importe total de las deudas incobrables relacionadas con el activo por cobrar.
¿Cuáles son los ejemplos de cuentas por cobrar?
Aquí hay un ejemplo de cuentas por cobrar.
Jane quiere comprar un jacuzzi de 5.000 dólares pero no tiene el dinero en el momento de la venta. La empresa de jacuzzis le facturaría y le daría 30 días para saldar su deuda. Durante ese tiempo, la empresa registraría 5.000 dólares en sus cuentas por cobrar. Cuando Jane lo pague, el dinero volvería a los importes de las ventas o al flujo de caja.
¿Y si Jane no paga su bañera de hidromasaje en 30 días? El dinero se seguiría debiendo, y la empresa se quedaría sin el dinero. Es por eso que las cuentas por cobrar se enumeran de manera diferente a las ventas.
Para las cuentas por cobrar impagadas, el siguiente paso sería ponerse en contacto con el cliente o contratar a una agencia de cobros para hacerlo.
¿Cuál es el asiento para las cuentas por cobrar?
Con la contabilidad de devengo, se registra una transacción tanto si se ha recibido efectivo como si no. Este es el sistema en el que se registra una cuenta por cobrar. Cuando se realiza una venta de servicios a un cliente, usted utiliza su software de contabilidad para crear una factura que automáticamente crea un asiento para acreditar la cuenta de ventas y cargar la cuenta de cuentas por cobrar.
Después de que el cliente pague la factura, se cargaría la cuenta de efectivo y se acreditaría la cuenta de cuentas por cobrar.
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