Cuando Bence nació a finales de 2015, no había nada fuera de lo normal en él.
El parto transcurrió con relativa normalidad, no tardó demasiado en salir, tenía una altura normal y pesaba un poco más que la media.
Salvo que había algo muy especial en él: su pelo.
Bence nació con la cabeza cubierta por una hermosa mata de pelo blanco como el hielo. Esta característica hace que le apoden Príncipe Azul entre los que están en la sala.
El médico de Bence lo ha comprobado y ha encontrado que esto está lejos de ser una causa de estrés o enfermedad.
Sin embargo, ha considerado la posibilidad de que se trate de albinismo, que es una condición en la que su cuerpo produce poca o ninguna melanina.
Sin embargo, sólo su pelo muestra signos de ello, y en ninguna otra parte de su cuerpo.
El veredicto es que es probable que el pelo de Bence se enfrente a un breve momento de escasez temporal de pigmento, por lo que se oscurecerá a medida que crezca.
El pequeño ha pasado todos los controles de salud, pero se ha llevado una muestra de sangre a un laboratorio para que le hagan pruebas adicionales.
Aparte de su pelo, Bence es un niño normal y saltarín, y está bastante emocionado por empezar esta aventura que llamamos vida.
Seguro que se convertirá en alguien especial – ¡si hay una señal más clara de ello, no sé cuál es!
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