Descubrir bultos y protuberancias en su perro puede causar pánico inmediato. Los padres de perros siempre asumen el peor de los casos: el cáncer. Pero muchos bultos son a menudo tumores grasos benignos llamados: lipoma canino.
La palabra «tumor» suena aterradora, pero los lipomas son sólo una acumulación de tejido graso, que suele ser inofensivo a menos que limiten la movilidad.
Un veterinario debe evaluar cualquier bulto nuevo que no desaparezca por sí mismo, como una picadura de insecto. Los lipomas infiltrativos no son cancerosos pero pueden crecer adheridos a los músculos, causando problemas de movilidad y dolor, y pueden necesitar ser extirpados.
Tumores de piel grasa en perros: Lipoma de tejido canino
Los lipomas caninos son masas blandas que crecen bajo la piel. Los tumores grasos son a menudo móviles, no son dolorosos al tacto, y parecen no estar unidos al músculo por debajo o a la piel por encima.
Los lipomas son a menudo inofensivos, pero si son infiltrantes pueden conectarse al tejido muscular.
Causas de los tumores grasos: Lipoma Perro
Según VetInfo, la causa exacta de los tumores grasos es desconocida, pero hay algunos factores comunes en los perros que son propensos a ellos.
Los lipomas son más comunes en perros con sobrepeso y de edad avanzada, lo que sugiere que la dieta y las hormonas pueden ser factores. Los lipomas pueden ser simplemente causados por la sobreproducción de células grasas, y los tumores grasos son más comunes en ciertas razas, por lo que el problema también podría ser hereditario.
¿Tiene tu perro? Fotos de lipomas en perros
Golpes y protuberancias
Los golpes y protuberancias pueden ser causados por alergias y picaduras de insectos. Una alergia alimentaria o ambiental puede causar ronchas bajo la piel. Estos bultos pueden producir picor y suelen desaparecer (si se elimina el alérgeno) en uno o dos días.
Las picaduras de insectos pueden ser rojas y a veces tendrán una marca que desde el aguijón que puede indicar que fue una picadura de insecto. Si el bulto desaparece rápidamente, no se trata de un lipoma.
Tumores benignos
Los tumores benignos de la piel son más comunes en perros mayores y con sobrepeso.
Pueden estar en la piel, como un lunar, o bajo la piel, como un tumor lipoma.
Lipomas caninos son suaves al tacto y están hechos de tejido graso inofensivo. Los perros pueden desarrollar adenomas sebáceos, que son glándulas sebáceas obstruidas que se convierten en quistes y a menudo se curan (o a veces se rompen) por sí solos.
Las razas de perros como el Cocker Spaniel son propensas a estos quistes. Los quistes sebáceos pueden aparecer en los ojos (adenoma de las glándulas de meibomio) y no requieren su extirpación a menos que causen dolor o perjudiquen la vista.
Tumores malignos
Los tumores de células maestras son el tipo de tumor maligno más común en los caninos.
Pueden variar en apariencia, por lo que un veterinario siempre debe examinar cualquier bulto nuevo. Estos tumores malignos pueden aparecer en casi cualquier parte del cuerpo.
Los tumores malignos se extienden y crecen; cuanto antes se detecten y extirpen, mejor será el pronóstico.
Los sarcomas de tejidos blandos son tumores cancerosos que se producen en los tejidos conectivos de los perros, según el Centro de Cáncer Veterinario. Los tumores pueden ser difíciles de eliminar y pueden requerir radioterapia como tratamiento.
Algunos tumores malignos que crecen en el hueso o internamente pueden ser difíciles de detectar. Los síntomas pueden incluir hinchazón o cojera de una extremidad.
¿Ciertas razas de perros/perros viejos son más propensos a los bultos de lipoma en perros?
Ciertas razas de perros como los Golden Retriever, los Mini Schnauzers, los Doberman Pinchers, los Labradores Retriever y algunos perros mestizos son más propensos a los bultos de lipoma.
Los perros con sobrepeso y de edad avanzada también son más propensos a los lipomas, aunque se desconoce la causa exacta de estos tumores grasos. Pueden tener un lipoma o múltiples lipomas.
¡Ayuda! Necesito un veterinario? Cuando el lipoma del perro estalla
Los lipomas del perro rara vez estallan y no suelen adherirse a la piel. Los lipomas en perros pueden confundirse con los quistes, que sí se rompen y pueden rezumar líquido o sangrar.
Si un quiste se rompe y el perro parece tener dolor o la hemorragia no se detiene, debe acudir a un veterinario. Asegúrese de que el quiste se limpia y no se infecta.
¿Cirugía? ¿Medicina? O nada en absoluto? Tratamiento del lipoma en perros
El lipoma en perros no puede diagnosticarse típicamente mediante un examen visual.
El veterinario normalmente realizará una aspiración con aguja fina, que inserta una pequeña aguja en la masa y luego se recogen las células o el líquido y luego se analizan.
El veterinario puede realizar una infiltración (inyección) con cloruro de calcio o medicamentos antiinflamatorios no esteroideos para ayudar a reducir el tumor graso.
Coste de la eliminación de lipomas en perros
Según Embrace Pet Insurance, el diagnóstico con aspiración con aguja fina cuesta entre 20 y 100 dólares.
Extraer quirúrgicamente un lipoma es más caro. Cada masa costará entre $200 a $500 dólares para su remoción.
Si la masa está en un lugar difícil o conectada a un tejido, la eliminación puede costar más de 1000 dólares.
Algunos veterinarios pueden querer hacer un análisis de sangre antes de la extirpación quirúrgica y las masas pueden requerir otro viaje al veterinario después si hay algún problema postoperatorio.
Su mascota puede tener que usar un collar isabelino después de la cirugía para asegurarse de que no puede masticar sus puntos. Debe seguir las recomendaciones de su veterinario sobre el tiempo que debe llevar el cono.
Algunos veterinarios recomendarán que se extirpe el lipoma sólo por el tamaño de la localización. Algunos de estos pueden crecer muy rápidamente y se han reportado lipomas que pesan más de 20 libras.
Tratamiento natural de los lipomas en perros
Dado que no hay una causa específica de los tumores lipomatosos, puede ser difícil tratar o prevenir naturalmente los tumores grasos.
Los perros con sobrepeso y con dietas pobres pueden ser más propensos a los lipomas, por lo que una dieta adecuada y el ejercicio pueden ayudar.
La revista Dogs Naturally recomienda eliminar tantas toxinas de la comida, el agua y el entorno como sea posible para tratar los lipomas.
5 cosas que debes saber sobre los lipomas en perros
- La única forma de estar 100 por ciento seguro de que un tumor graso es benigno es extirparlo y someterlo a pruebas completas.
- El lipoma es más común en perros de más de 8 años.
- Los perros con sobrepeso pueden ser más propensos a tener lipomas.
- Algunas masas malignas pueden parecer lipomas, por lo que un veterinario debe revisar individualmente cada masa.
- Puede haber un solo lipoma o múltiples, que se llaman lipomatosis múltiple familiar.
Un tejido graso grumoso que debe ser vigilado
Si el veterinario se siente seguro de que el tumor es benigno, a menudo no recomendará la cirugía a menos que el tumor sea muy grande o moleste al perro.
Dado que los lipomas son más comunes en los perros mayores, la cirugía puede ser más arriesgada. Es probable que el veterinario recomiende que se vigile el bulto, para asegurarse de que no hay cambios.
Un bulto puede medirse y vigilarse en casa colocando un trozo de papel encerado sobre el bulto y trazando los bordes con un rotulador y escribiendo la fecha. Esto debe hacerse regularmente para asegurarse de que no hay cambios en el tamaño o la forma.
Muchos bultos son benignos, causados por el tejido graso llamado lipomas. Puede ser casi imposible decir al mirar un bulto si es o no maligno y canceroso.
Los tumores malignos pueden necesitar ser extirpados o tratados con radioterapia. Los lipomas suelen ser benignos y no se extirpan a menos que causen dolor o problemas de movilidad. Los bultos pueden ser temporales, causados por alergias o picaduras de insectos.
Si un bulto no desaparece en unos días, se recomienda una visita al veterinario.
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