El ingenioso y creativo Tyler Perry ha encantado al público de su cine con sus habilidades de actuación, escritura y producción generando una riqueza masiva de más de 600 millones de dólares mucho antes de los 50 años. Tiene casas en las Bahamas, Wyoming, Texas, Mulholland Estates en Los Ángeles (actualmente cedida al Príncipe Harry y Meghan Markle), pero elige vivir y trabajar en Georgia en su propiedad de 1.100 acres donde se encuentran sus estudios de cine. Aficionado a la zona de Atlanta, su casa de toda la vida fue una mansión palaciega en la comunidad de Paces Ferry, en Buckeye, que construyó en 2007 en 17 acres de terreno de primera calidad con vistas al río Chattahoochee. Cuando la vendió por 17,5 millones de dólares en 2016, fue la vivienda más cara de la historia de la ciudad. Ese comprador la ha vuelto a vender por 15 millones de dólares, lo que sigue siendo la casa más cara de Atlanta.
Por encima de la relajada Atlanta, Perry construyó su casa con un diseño basado en el Palacio de Versalles, pero le añadió características que habrían dejado sin palabras al rey Luis XIV. Además de un helipuerto, la casa de 34.688 pies cuadrados cuenta con siete dormitorios y catorce baños, majestuosos salones formales, una biblioteca de dos plantas, piscina de borde infinito en el exterior, piscina de resistencia en el interior, pista de tenis iluminada sobre un aparcamiento de dos plantas, gimnasio totalmente equipado, spa, teatro, casa de hobbies y un salón de baile subterráneo con cocina de catering. Hay jardines formales e informales, un generador para toda la finca, caseta de vigilancia, suite para el cuidador y un sistema de seguridad de nivel presidencial que incluye dos entradas residenciales cerradas y aseguradas.
Perry no se guardó nada en lo que respecta a la jardinería formal. Tyler gastó originalmente unos 40 millones de dólares en la construcción de la casa y una buena parte del dinero se destinó a plantas completas, árboles y arbustos topiarios. Una exuberante vegetación que ahora se extiende en jardines formales en terrazas desde la casa, con senderos que serpentean entre los árboles, las flores y las plantas. Los terrenos incluyen una piscina al aire libre con un cuadro de estilo versallesco en el fondo y zonas de descanso entre fuentes donde los huéspedes pueden relajarse en taburetes mientras disfrutan de las bebidas y la conversación con los bañistas. La casa y los terrenos podrían acomodar fácilmente a más de cien invitados con mucho espacio de sobra.
El televangelista David Turner compró la casa a Perry en 2016 y la convirtió en un estudio de producción para una cadena de televisión cristiana basada en la web, Jesus Live TV, y ahora la ha vendido al comediante, presentador de programas de entrevistas y autor de autoayuda Steve Harvey por 15 millones de dólares. El agente de la propiedad de Perry, Chase Mizell de Atlanta Fine Homes Sotheby’s, listó la casa tanto para la venta a Turner como para la venta a Harvey.
Información cortesía de TopTenRealEstateDeals.com
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