(CNN) Un par de milisegundos marcan la diferencia.
El fenómeno de la natación Adam Peaty batió a primera hora del domingo su propio tiempo récord en los 100 metros braza masculinos, convirtiéndose en el primer hombre en terminar la prueba en menos de 57 segundos.
El británico de 24 años marcó un tiempo de 56,88, casi dos segundos por delante de sus rivales, en las semifinales de la prueba en los Campeonatos Mundiales Acuáticos de 2019 en Gwangju, Corea del Sur.
Está previsto que compita en la ronda final de los 100 metros braza masculinos el lunes.
Peaty estableció previamente el récord de la prueba en una actuación en la que ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Verano de 2016 en Río de Janeiro, con un tiempo de 57,13.
Le dijo a la natación británica, el organismo que rige el deporte, que no planea celebrarlo todavía: considera que su hazaña es un «bonus» antes de las finales.
«He venido aquí para ganar un título mundial, y eso es mañana, y ese sigue siendo mi principal objetivo», dijo.
Piensa defender su título en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Una estadounidense se coloca en segundo lugar y se avivan viejas rivalidades
En otro lugar de los campeonatos, la estadounidense Katie Ledecky perdió ante la australiana Ariarne Titmus en los 400 metros libres. Ledecky obtuvo la medalla de plata por su actuación, a sólo 1,21 segundos de Titmus.
El australiano Mack Horton, que obtuvo la plata en los 400 metros libres masculinos, se negó a subir al podio con el medallista de oro, el chino Sun Yang. Horton llamó a Sun «tramposo de las drogas» en los Juegos Olímpicos de 2016 en Río, dos años después de que Sun diera positivo por una sustancia prohibida y fuera expulsado del deporte durante tres meses.
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