Hablemos de algunos ejemplos:
«Cuando mi pareja coquetea con otras personas en mi cara, ¡me parece tan irrespetuoso!»
Algunas personas piensan que si su pareja habla o sale con ciertas personas, es un «coqueteo» o un comportamiento irrespetuoso. Sin embargo, es importante reconocer que esta creencia suele estar arraigada en la posesividad, que no es saludable. En una relación sana, no es una falta de respeto que la pareja hable o esté cerca de otros chicos/chicas/personas. De hecho, ¡todo el mundo tiene derecho a tener amistades con quien quiera!
Por eso la confianza, la comunicación honesta y los límites claros y saludables son tan importantes en una relación. Si tu pareja no quiere que hables o salgas con otra persona porque cree que es «irrespetuoso» con ella, eso es una bandera roja.
«Mi pareja es tan irrespetuosa en las redes sociales. ¡Veo que le dan like a las fotos de la gente y las comentan todo el tiempo! También publican ciertas fotos, como selfies, que no me gustan».
Las redes sociales pueden ser una gran manera de relacionarse con los demás, pero a menudo escuchamos a personas que piensan que la forma en que su pareja actúa en línea es «irrespetuosa». Pueden pensar que darle un «like» o comentar las fotos de otra persona, o tuitear/DMear a otra persona, es una falta de respeto. Sin embargo, es importante recordar que ninguno de los dos miembros de la pareja tiene derecho a vigilar, acosar o controlar a su pareja en Internet.
Al igual que en el primer escenario que comentamos, todos tenemos derecho a comunicarnos con otras personas fuera de nuestra relación. Utilizar las redes sociales para intentar controlar a la pareja es una bandera roja de abuso digital.
«Mi novia a veces se viste como si estuviera soltera, y no me gusta. Es una falta de respeto que se ponga ciertas cosas, ¡sabiendo que tenemos una relación!»
Parada difícil aquí. No existe eso de vestir como si estuvieras soltera, ¡ni siquiera vestir como si tuvieras una relación! Todo el mundo tiene derecho a vestir lo que le haga sentir cómodo y feliz. No está bien que un miembro de la pareja intente controlar o dictar lo que lleva su pareja.
De nuevo, esta creencia tiene su origen en los celos o la inseguridad. La forma de vestir de alguien es su elección, y en una relación sana, los miembros de la pareja respetan las elecciones personales del otro.
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