Hay toneladas de estilos de crianza por ahí. La mayoría de ellos tienen al menos algunas buenas razones para considerarlos. Sin embargo, hay uno que realmente puede tener efectos perjudiciales a largo plazo en su hijo desde que es pequeño hasta que tiene sus propios pequeños: la crianza no involucrada.
¿Qué es la crianza no involucrada?
Como su nombre indica, la crianza no implicada se caracteriza por un padre no implicado. Este estilo -a veces denominado crianza negligente- se caracteriza por «una falta de respuesta a las necesidades del niño», según Verywell Mind. Un padre no involucrado sería típicamente uno que tiene «pocas o ninguna demanda de sus hijos» y uno que es «a menudo indiferente, desdeñoso, o incluso completamente negligente.»
Parenting For Brain describe la crianza no implicada en el contexto de los cuatro estilos de crianza de Baumrind como «baja capacidad de respuesta y baja exigencia», lo que significa que el padre no responde al niño y a sus necesidades, pero tampoco exige nada. Esto lleva a un padre que probablemente tenga una falta de apego emocional a su hijo. También es típico que no se apresuren a mostrar afecto o calidez a su hijo.
Otro sello distintivo de la crianza no involucrada, según Healthline, es la falta de reglas o expectativas sobre el comportamiento. Esta falta de disciplina no se hace para ayudar al niño a ser independiente, sino más bien por una resistencia a disciplinar a su hijo a menos que el comportamiento del niño les afecte directamente. En general, permiten que el niño actúe como le plazca, lo que significa que el padre no involucrado no se molestaría por el bajo rendimiento escolar o los problemas de disciplina.
En general, el padre no involucrado estaría más centrado en sus propias necesidades y problemas, en lugar de los del niño, lo que indica una falta de interés general en su propio hijo.
Causas de la falta de implicación de los padres
A menudo, un padre no involucrado no se dará cuenta de que está incurriendo en este estilo de crianza, según Healthline. De hecho, Parenting For Brain, Healthline y Verywell Mind afirman que los padres no implicados a menudo simplemente repiten un estilo de crianza que experimentaron en su propia infancia.
Además, muchos padres no implicados tienen sus propios problemas de salud mental, como depresión, alcoholismo y abuso de sustancias. Tal y como informa Parenting For Brain, los investigadores han descubierto que los padres no implicados suelen tener problemas de abuso de sustancias y, de los que tienen problemas de abuso de sustancias, hasta el 83% de ellos tenían padres con adicción y el 55% fueron descuidados durante la infancia.
Efectos de la paternidad no implicada
Los efectos de la falta de implicación de los padres comienzan en la infancia pero tienen efectos duraderos durante toda la vida del niño.
0 comentarios