¿Por qué es tan importante lavarse las manos?
Un delicioso pastel de barro, una piedra de la buena suerte, una simpática rana… son sólo algunos de los tipos de regalos que a los niños les encanta traer a casa. Pero estos adorables regalos también pueden traer consigo millones de gérmenes.
Los niños no siempre escuchan cuando los padres les dicen que se laven las manos antes de comer, después de ir al baño o cuando entran a casa después de jugar. Pero es un mensaje que merece la pena repetir: lavarse las manos es, con diferencia, la mejor manera de evitar que los gérmenes se propaguen y de que los niños enfermen.
Primera línea de defensa contra los gérmenes
Los gérmenes pueden propagarse de muchas maneras, entre ellas:
- tocar las manos sucias
- cambiar pañales sucios
- a través del agua y los alimentos contaminados
- a través de las gotitas en el aire que se liberan al toser o estornudar
- en superficies contaminadas
- a través del contacto con los fluidos corporales de una persona enferma
Cuando los niños entran en contacto con los gérmenes, pueden infectarse sin saberlo simplemente tocándose los ojos, la nariz o la boca. Y una vez que se infectan, suele ser cuestión de tiempo que toda la familia contraiga la misma enfermedad.
Un buen lavado de manos es la primera línea de defensa contra la propagación de muchas enfermedades – desde el resfriado común hasta las infecciones más graves, como la meningitis, la bronquiolitis, la gripe, la hepatitis A y la mayoría de los tipos de diarrea infecciosa.
Lavarse las manos correctamente
Aquí se explica cómo fregar esos gérmenes. Enseñe esta rutina a sus hijos – o mejor aún, lávense las manos juntos a menudo para que aprendan lo importante que es este buen hábito:
- Lávese las manos con agua tibia. Asegúrate de que el agua no esté demasiado caliente para las manos pequeñas.
- Usa jabón y haz espuma durante unos 20 segundos (no es necesario un jabón antibacteriano, cualquier jabón servirá). Asegúrate de limpiar entre los dedos y debajo de las uñas, donde a los gérmenes les gusta estar. Y no te olvides de las muñecas!
- Aclara y seca bien con una toalla limpia.
- Para minimizar los gérmenes que se transmiten en tu familia, haz que lavarse las manos regularmente sea una norma para todos, especialmente:
- antes de comer y cocinar
- después de ir al baño
- después de limpiar por la casa
- después de tocar animales, incluidas las mascotas de la familia
- antes y después de visitar o cuidar a cualquier amigo o familiar enfermo
- después de sonarse la nariz, toser o estornudar
- después de estar al aire libre (jugando, trabajando en el jardín, paseando al perro, etc.)
¡No subestime el poder de lavarse las manos! Los pocos segundos que pasas en el lavabo podrían ahorrarte viajes a la consulta del médico.
Revisado por: Rupal Christine Gupta, MD
Fecha de revisión: Agosto 2014
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