Los senos paranasales son cavidades en los huesos alrededor de la cara y sobre los ojos. Los resfriados o las alergias pueden hacer que se hinchen y se llenen de mucosidad. Una infección de los senos nasales, o sinusitis, está causada por una bacteria o un virus. Los medicamentos de venta libre suelen ser suficientes para eliminarla, pero la presión, el dolor y otros síntomas pueden ser duros. Sin embargo, existe otro tratamiento eficaz para la sinusitis: el calor.
Aunque no lo creas, el calor es un descongestionante nasal natural. El frío de una bolsa de hielo puede hacer que la mucosidad de los senos nasales se espese, empeorando los síntomas. El calor puede utilizarse de varias formas:
Compresas calientes: Una toalla caliente en la cara puede ayudar a aliviar la presión, y una toallita también funciona bien. Aplícalo en las mejillas y la frente para ayudar a aliviar la hinchazón y la sensación de palpitación. Antes de acostarte, túmbate en la cama o en el sofá y mantén el paño sobre la cara de cinco a diez minutos para obtener los mejores resultados.
Elimina con vapor: Cuanto más vapor, mejor. Por eso funciona una ducha o una taza de té caliente. Al respirar el vapor, el calor afloja la mucosidad y la humedad alivia la sequedad. Una ducha caliente también es estupenda para los senos paranasales congestionados, ya que el vapor pasa fácilmente a los pulmones y a las fosas nasales.
Tratamiento con vapor: El agua caliente y el té son una gran combinación para vaporizar los senos nasales. Hierve un poco de agua y añade una hierba como la manzanilla o el tomillo. Deja que se enfríe un poco y vierte el líquido en un cuenco. Ponte una toalla sobre la cabeza, con la cara sobre el cuenco, y respira profundamente: el vapor caliente acabará por aliviarte.
Humidificar: Aunque no aporta calor, un humidificador puede despejar tus senos nasales y aliviar la presión para que puedas dormir. El aire húmedo suele ser eficaz para despejar la congestión. Los aerosoles nasales salinos funcionan de forma similar, pero contienen compuestos que ayudan a romper la mucosidad y a aliviar la hinchazón.
Salpimentar: El calor no siempre tiene que venir de la temperatura. La comida picante es conocida por despejar la congestión. El alivio puede ser temporal, pero el wasabi o el rábano picante, el jalapeño, el jengibre picante, la cebolla o el ajo funcionan incluso para congestiones severas, si quieres saber cómo drenar tus senos nasales de forma natural.
Cuida tus cilios: Los diminutos pelos de tus conductos nasales mueven las bacterias y toxinas hacia la garganta para que puedan ser tragadas y digeridas. La mucosidad espesa puede dificultar el movimiento. Las compresas calientes aumentan el flujo sanguíneo, aflojan la mucosidad y ayudan a mejorar el movimiento de los cilios. La hidratación es útil, con té y soluciones salinas útiles para estimular los cilios.
Consigue una mascarilla: Aplicando los beneficios naturales del calor para la presión y la congestión de los senos nasales, la mascarilla facial Sniff Relief ofrece un ajuste cómodo y ocho ajustes de temperatura. Incluso puedes usarla antes de acostarte: se incluye un apagado automático para que el calor no permanezca mucho tiempo. La máscara se amolda a la forma de la nariz para un máximo confort.
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