Es un (muy buen) signo de los tiempos que el vello púbico sea un tema de conversación últimamente. Famosas como Emma Watson (que jura por el aceite acondicionador de vello púbico) y Ashley Graham (que recientemente compartió sus preferencias de vello púbico) lo han dicho antes: El vello púbico es completamente normal. Obviamente, lo que elijas hacer con él es tu asunto y prerrogativa, ya sea una depilación regular o el afeitado ocasional o nada en absoluto.
Pero, hay grandes beneficios que vienen con el mantenimiento de tu vello púbico. Después de todo, no estaría ahí si no sirviera para algo. El año pasado, un estudio demostró que alterar el pubis, ya sea depilándose o afeitándose, podría aumentar el riesgo de contraer una ETS en un 80%. Otras fuentes respaldan esta afirmación, ya que los pequeños desgarros o lesiones en la piel causados durante la depilación pueden hacer que seas susceptible de contraer infecciones, lo que significa que debes tener mucho cuidado al afeitarte o depilarte ahí abajo. Por otro lado, si prefieres dejar que tu vello púbico crezca, aquí tienes exactamente cómo debes cuidarlo.
Aquí tienes por qué tienes vello púbico.
No hay nada sucio en el vello púbico. De hecho, está ahí para mantenerte a ti y a tu vagina seguros y limpios. «El propósito del vello púbico es proteger la vagina de la fricción y las abrasiones», dice Jaime Knopman, M.D., endocrinólogo reproductivo en el Centro de Medicina Reproductiva de Colorado de NYC y cofundador de Truly-MD.com. «También puede ayudar a prevenir el crecimiento de bacterias». Dado que la región vaginal puede ser una zona sensible, el vello púbico sirve básicamente como su primera línea de protección contra las bacterias, las ITS, e incluso la irritación durante el sexo.
Cómo cuidar el vello púbico.
El vello púbico no requiere su propio régimen de belleza, siempre y cuando te duches de forma regular. «Sólo hay que lavarlo con agua y jabón», dice el doctor Knopman. En serio: No hay necesidad de lavarlo con champú, acondicionarlo, darle un tratamiento de aceite o regalarle un día de spa. Así que si te enjabonas con jabón o con un jabón para el cuerpo, debería ser suficiente. Una nota: Estamos hablando de su vello púbico exclusivamente, no del vello dentro de su vagina. (Su vagina cuida tan bien de sí misma que ni siquiera necesita jabón, y el uso de cualquier cosa que no tenga un pH equilibrado en esa zona puede realmente alterar su equilibrio.)
Esto es lo que debes hacer si te acicalas ahí abajo.
Si decides afeitarte, depilarte o recortarte el vello corporal, todavía hay algunas cosas que debes saber sobre el cuidado adecuado. Primero, lo básico: Si te vas a afeitar, aplícate siempre crema de afeitar antes de empezar. «Si te afeitas en seco, aumentan las posibilidades de que te cortes o te salga una erupción», explica el Dr. Knopman. «Aplicar una crema de afeitar -además de agua y jabón- puede ayudar a reducirlo». En segundo lugar, asegúrate de que tu maquinilla de afeitar esté limpia, si no es totalmente nueva. Y considera la posibilidad de adquirir una recortadora o maquinilla de afeitar específica para el vello púbico, especialmente si piensas darle forma o arreglarlo. Si te cortas -y los cortes ocurren- evalúa la situación y limpia la zona con agua oxigenada. A continuación, deja que la zona se cure antes de volver a acicalarte. ¿Y las molestas encarnaduras? Aquí tienes todo lo que necesitas saber para tratarlas mientras te crece el vello púbico.
Ilustración de Fabiola Lara.
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