Siempre quiero más de mi personaje, así que vuelvo a empezar. Después de 2000 horas jugando a Skyrim, terminando la misión principal una sola vez, y usando un total de dos razas (Khajit y Elfo de Madera), me encuentro trabajando las misiones demasiado rápido perdiendo la esencia del juego lento y del rol. Por ejemplo, en cuanto termino la Garra de Oro y el túmulo de Bleak Falls, me dirijo a Ivarstead. Desde allí visito a los Barbas Grises, consigo la siguiente tarea de ellos, y luego me dirijo a Riften. En esta construcción soy un ladrón y eventualmente llegaré a la Hermandad Oscura. Sigo este enfoque porque es una experiencia de juego de rol. No voy en orden de búsqueda, ni viajo rápido ya que me quita algunos encuentros realmente buenos.

Para juegos como Skyrim, me gusta explorar y tomarme cada búsqueda como una experiencia global, pero individual. Por ejemplo, Honningbrew Mead yo completaría esa quest solo con mi arco ya que me da una buena oportunidad para escabullirme y conseguir algunos buenos disparos de muerte.

No sé si llegaré al nivel 80, y solo he usado la opción Legendaria una vez. Para algunas habilidades, no veo la necesidad de hacerlo. Sin embargo, Legendario te da la posibilidad de cambiar la dirección de tus personajes: un ladrón se transforma en un Guerrero codificado, etc.

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