Conoces la escena. Has cargado bolsas con tus antiguas prendas favoritas de las que apenas puedes desprenderte pero necesitas el espacio en el armario. O el dinero en efectivo. Llevas tu preciado armario a una tienda de reventa, ves cómo rechazan cada pieza una por una y, de alguna manera, sales con más conjuntos de los que viniste.

Con la limpieza de primavera en mente, hemos decidido ayudarte con algunos de tus problemas de venta de ropa.

Los neoyorquinos tienen varias opciones para comprar, vender e intercambiar ropa vieja, desde dejar una bolsa en Beacon’s Closet o Buffalo Exchange hasta organizar un intercambio en Craigslist o dejar una pieza más valiosa en consignación en tiendas como Crossroads, Second Time Around o Eleven.

Carrie Peterson, presidenta y fundadora de Beacon’s Closet, dice que un rechazo inmediato para los compradores es traer enormes bolsas de basura de ropa. «Eso suele indicar que han traído de todo… a veces incluso calcetines y calzoncillos, que no aceptamos». Investiga y conoce quién compra qué, para evitar vergüenzas y cargas pesadas.

Gina Nowicki, de Crossroads Trading Company, sugiere echar un vistazo a los estantes primero, para reconocer las etiquetas, los estilos y las condiciones de la ropa antes de traerla.

«Comercializa tus piezas en la bolsa», dice. «Asegúrese de que la ropa está limpia; abroche todos los botones y cierre todas las cremalleras; y dóblela y colóquela en la bolsa en una pila ordenada. Nuestros compradores tienen segundos para evaluar cada prenda; ¡dale a cada pieza una gran oportunidad de brillar!»

Si las prendas tienen agujeros, les faltan botones o necesitan otras reparaciones, arréglalas antes de intentar vender el artículo, o renuncia a donarlo.

Peterson dice que la presentación de tus artículos en venta no es tan importante como saber qué no se vende realmente en su tienda. Beacon’s revisa los estantes a diario y dona los artículos mensualmente: los artículos que se donan constantemente no se compran hasta que se hace evidente una nueva demanda.

Vende para la temporada actual: si quieres hacer algo de dinero con tu abrigo de invierno tan bueno como el de antes, espera hasta principios de otoño para presentarlo a los compradores.

Las prendas de diseño tienen un precio más alto garantizado y casi siempre es probable que se vendan si están en buen estado, pero los artículos sin etiqueta y con estilo pueden venderse igual de bien. «La demanda de estilo lo supera todo. Si algo es bonito y alguien va a comprarlo, esa es la fuerza motriz de nuestras pautas de aceptación del inventario», dice Peterson.

Si ha seguido estas pautas pero sigue sin tener éxito en las ventas, no se desanime del todo. Peterson dice que, aunque los compradores están entrenados casi científicamente en lo que deben buscar, hay un nivel de subjetividad en el estilo, así como un inventario siempre cambiante – ¡una semana puede estar sobrecargado de monos vintage mientras que la siguiente hay una gran demanda!

Y cuando todo lo demás falla, siempre está eBay.

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