Giuseppe Verdi: Visión general
Giuseppe Fortunino Francesco Verdi o Giuseppe Verdi fue un hombre de gran talento operístico, perteneciente a la época romántica de la música. Nacido en el año 1813, Verdi fue muy conocido por una carrera singular y fuera de lo común. Junto con su hábil creación de melodías y el uso intensivo de elementos teatrales en sus obras, su estilo propio, claramente diferente de las óperas italianas tradicionales, le granjeó gran fama. Tras una larga y variada vida, el maestro italiano falleció en 1901.
Sus principales obras son:
- Rigoletto
- Il trovatore
- La traviata
- Don Carlos
- Aida
- Misa de Réquiem
- Otello
- Falstaff
Giuseppe Verdi: El hombre que empujó los límites de la libertad melódica
La madre de Verdi, Luigia Uttini, y el padre, Carlo Giuseppe Verdi, eran personas extremadamente sencillas que llevaban una vida modesta. Cuando Verdi tenía cuatro años, sus talentos musicales ya se revelaban al recibir una espineta. A los 10 años, ya estaba en la escuela secundaria o Ginnasio, en Busseto.
Verdi llamó posteriormente la atención de Antonio Barezzi, que era un comerciante que sabía apreciar la buena música. Llevando a Verdi a su casa con el fin de ayudar al joven prodigio a realizar su potencial, Barezzi lo envió a Milán para que recibiera una educación superior.
El año 1832 vio a Verdi solicitar el ingreso en el Conservatorio de Milán, pero su admisión fue rechazada debido a su exceso de edad. Finalmente, Verdi tuvo el privilegio de estudiar con el famoso compositor Vincenzo Lavigna, que también era socio del teatro de ópera La Scala.
Giuseppe Verdi se casó con la hija de Antonio Barezzi, Margherita, en 1836. La pareja tuvo dos hijos, que murieron en su infancia.
Verdi escribió Oberto, Conte di San Bonifacio, a lo largo de cuatro años, estrenada en el Teatro alla Scala de Milán en 1839. Se basó en un libreto de Antonio Piazza y Verdi completó la ópera con la ayuda del músico Giulio Ricordi. Aunque no se encuentra entre sus obras más significativas, tuvo el suficiente éxito como para que Verdi obtuviera un encargo para otras tres óperas en el Teatro alla Scala.
Después de Oberto llegó Un giorno di regno, estrenada en el Teatro alla Scala en 1840. Desgraciadamente, fue un fracaso, criticado tanto por el público como por la crítica. Para empeorar la situación, ese mismo año murió Margherita, la amada esposa de Verdi.
El compositor, ahora deprimido, perdió toda esperanza y juró retirarse de la composición musical. Bartolomeo Merelli, que era un empresario y libretista italiano, consoló a Verdi y le inspiró para que volviera a escribir. Verdi compuso Nabucco en 1842, y su primera representación le colmó de elogios. Existe una leyenda que dice que Giuseppe Verdi fue persuadido de volver a componer por las palabras del «Va Pensiero», un coro de los esclavos hebreos.
A continuación llegaron I Lombardi Alla Prima Crociata en 1843 y Ernani en 1844. Verdi compuso su primera obra maestra, Macbeth, en 1847. Aunque está considerada como una de sus piezas más importantes, no se trataba de una historia de amor y, por lo tanto, iba totalmente en contra del estilo establecido de la ópera italiana del siglo XIX.
En 1847, I Lombardi, de Verdi, fue convenientemente revisada para la ópera de París en la Salle Le Peletier bajo el título de Jerusalén y ésta se convirtió en la primera innovación del compositor italiano utilizando el estilo de la gran ópera francesa.
A continuación, Verdi escribió su obra más destacada y famosa, Rigoletto. Estrenada en la ópera La Fenice de Venecia en el año 1851, su libreto, escrito por Francesco Maria Piave, se basaba en la obra de Victor Hugo «Le roi s’amuse». Marcando el inicio de las creaciones del periodo medio de Verdi, Rigoletto supuso un cambio definido del típico formato de aria italiana a un estilo musical más coherente y contemporáneo. La historia se precipita hacia su conclusión con una sensación de indecisión moral.
Una ópera marcada por su perfecta asimilación de la comedia con los acontecimientos trágicos, la música de Rigoletto varió a lo largo de su representación. Desde la canción, La Donna è Mobile hasta el cuarteto Bella Figlia dell’Amore, las variaciones fueron muchas.
Dado que Rigoletto estaba fuertemente basado en la controvertida e infame obra de Victor Hugo, «Le Roi s’amuse», sufrió tremendas ediciones para satisfacer la censura de la época.
El Trovador se produjo en Roma y La traviata en Venecia en el año 1853. La traviata estaba basada en «La dama de las camelias» de Alexandre Dumas.
Verdi, a los 38 años, tuvo un romance con la soprano Giuseppina Strepponi. Aunque su relación fue considerada escandalosa por muchos en la época, finalmente se casaron en el año 1859.
Un Ballo in Maschera estrenado en el año 1859, La forza del destino en el año 1862, fueron otras composiciones del prolífico compositor, Verdi. Además, su repertorio se amplió para incluir Les vêpres siciliennes de 1855 y Don Carlos de 1867, ambas representadas inicialmente en francés.
El año 1869 vio a Verdi escribir una parte de una Misa de Réquiem en memoria de Gioacchino Rossini, un famoso compositor italiano. Aunque se completó en vida de Verdi, no se interpretó hasta después de su fallecimiento en 1901.
Muchos historiadores y críticos consideran que Aida de Giuseppe Verdi fue una obra encargada para celebrar la apertura del Canal de Suez en Egipto en el año 1869. Sin embargo, según el estudioso de la música Julian Budden, Verdi rechazó tal oda. En consecuencia, cuando se sugirió que el eminente compositor alemán Richard Wagner hiciera la composición, Verdi firmó un acuerdo en 1870 y Aida se estrenó en 1871 en El Cairo con gran éxito. Algunas partes de Aida son identificables con las obras del compositor ruso Mikhail Glinka, popularizadas por el pianista Franz Liszt.
Otello fue la siguiente obra notable de Verdi y su penúltima ópera. Basada en la gran tragedia de Shakespeare, se representó por primera vez en Milán en el año 1887. En ella se aprecian grandes diferencias con respecto a sus obras anteriores. Entre ellas, la falta de patrones melódicos y la ausencia de un preludio. A pesar de estas diferencias, se considera una de sus composiciones más significativas y expresivas.
Falstaff, la última composición de Verdi que se estrenó en 1893 en La Scala de Milán, se basó en un libreto de Arrigo Boito que, a su vez, se basaba en Las alegres comadres de Windsor de Shakespeare. La obra obtuvo un gran éxito internacional. En los últimos años de su vida compuso obras sacras, conocidas como Pezzi sacri. La música del Renacimiento interesaba mucho a Verdi, especialmente la de Palestrina, que, según él, era el padre de la música italiana.
El ámbito musical y los intereses de Giuseppe Verdi se vieron significativamente afectados por los maestros anteriores como Rossini, Vincenzo Bellini, Gaetano Donizetti, Saverio Mercadante, Mikhail Glinda, Franz Liszt.
Verdi apenas empleaba el do de pecho en sus arias, ya que consideraba que cantar esa nota en concreto provocaba distracciones en el intérprete. No obstante, hubo presencia de Do agudos en Jerusalén y también en la versión original de La forza del destino. Su confianza en su don melódico era tremenda y evidente.
Giuseppe Verdi fue un pionero en las composiciones musicales de la época romántica. Como italiano, contribuyó enormemente a poner a Italia en el mapa mundial en cuanto a fama y grandeza operística. No sólo por su icónico Rigoletto, sino también por sus otras obras, que incluían adaptaciones de las grandes obras de William Shakespeare, Verdi se estableció como un compositor comparable a los de Wagner, Beethoven y Schumann.
Enlaces de referencia:
- Giuseppe Verdi en New World Encyclopedia
- Giuseppe Verdi en Britannica
- Giuseppe Verdi en Biography
- Giuseppe Verdi en Classical Music
- Diccionario esencial de compositores de Alfred Publishing
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