Por la Dra. Laurie Hess, Dipl ABVP (Práctica Aviar)

Como comedores sociales, los pájaros salvajes se alimentan en bandadas de cientos o incluso miles en la naturaleza. A las aves de compañía también les gusta compartir la hora de la comida con sus compañeros de bandada, ya sea con otras aves de la casa o con sus cuidadores humanos. Comer con los compañeros emplumados es una gran manera de socializarlos; sin embargo, hay algunos alimentos que los humanos adoran y que nunca deben ofrecerse a las aves de compañía debido a su potencial toxicidad.

Entre los alimentos más comunes que son tóxicos para las aves están:

1. Aguacate

Las hojas de la planta del aguacate contienen persina, una sustancia parecida a un ácido graso que mata los hongos de la planta. Cuando es ingerida por un ave, esta sustancia puede causar daños en el corazón, dificultad respiratoria, debilidad e incluso muerte súbita. Aunque algunos tipos de aguacate han sido consumidos con seguridad por algunas especies de aves, es difícil saber qué tipos de aguacate afectarán a qué especies. Tampoco está claro qué cantidad de aguacate tendría que comer un ave doméstica para verse afectada. Dadas las posibles consecuencias, lo mejor es simplemente evitar dar aguacate y alimentos que lo contengan (como el guacamole) a las aves. Omita la salsa y ofrézcale a su pájaro un palito de zanahoria o una vaina de guisantes.

2. Cafeína

A todos nos gustan las bebidas con cafeína, como el café, el té y los refrescos, porque saben muy bien, nos estimulan y nos despiertan. Podríamos pensar en ofrecer sorbos de estas sabrosas bebidas a nuestras aves de compañía, pero incluso uno o dos sorbos de estas bebidas pueden ser tóxicos para nuestros compañeros emplumados. La cafeína puede aumentar el ritmo cardíaco, inducir arritmias e hiperactividad, e incluso provocar un paro cardíaco en las aves. Por lo tanto, evite los productos con cafeína y opte por el agua o por una degustación ocasional de zumo de frutas para su pájaro sediento.

3. Chocolate

Al igual que nosotros, a los pájaros les cuesta resistirse al chocolate o a los alimentos que lo contienen. Sin embargo, incluso en cantidades muy pequeñas, el chocolate puede ser tóxico para las aves. El chocolate contiene teobromina y cafeína, que pueden provocar vómitos y diarrea, aumentar el ritmo cardíaco, provocar hiperactividad, inducir temblores y convulsiones, e incluso causar la muerte en las aves. Así que, la próxima vez que tenga la tentación de compartir una M&M o un Hershey’s Kiss con su amigo pajarito, ofrézcale en su lugar un trozo de fruta azucarada, como un mango, una papaya o una uva.

4. Sal

Una pizca aquí y otra allá. Muchos de nosotros añadimos casualmente este querido condimento a todo tipo de alimentos sin pensarlo. También nos encantan las patatas fritas saladas, las palomitas de maíz, los pretzels y las galletas saladas. Pero, al igual que el exceso de sal no es bueno para nosotros, tampoco lo es para nuestras aves, e incluso un poco es potencialmente tóxico para un pájaro pequeño. Incluso una patata frita o una galleta salada puede alterar el equilibrio de electrolitos y fluidos en el pequeño cuerpo de un pájaro, provocando sed excesiva, deshidratación, insuficiencia renal y la muerte. Así que, la próxima vez que quiera ofrecerle a su pájaro un capricho salado, elija un bocado o dos de palomitas o pretzels sin sal o una galleta salada baja, en su lugar.

5. Grasa

Todos sabemos que el consumo de alimentos ricos en grasa, como la mantequilla, el aceite, las carnes grasas y los frutos secos, puede provocar la acumulación de depósitos de colesterol en las paredes de nuestras arterias (lo que se conoce como aterosclerosis), lo que predispone a padecer enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. La ingesta excesiva de estos alimentos también puede conducir a la obesidad y a todos los problemas de salud que acompañan a esta condición. Los mismos procesos ocurren en las aves, y ciertas especies de pájaros, como los loros amazónicos y cuáqueros, son propensos a desarrollar niveles altos de colesterol y triglicéridos y la consiguiente enfermedad de las arterias coronarias. Por tanto, al igual que nosotros debemos limitar el consumo de alimentos ricos en grasas, las aves también deben hacerlo. Los pájaros pueden tomar de vez en cuando un bocado de carne magra cocinada, pero no hay que ofrecerles cantidades abundantes de estos alimentos llenos de grasa, sobre todo si son pequeños en relación con el tamaño de la ración. A los pájaros les encantan los frutos secos, pero una almendra o una nuez sin sal al día es suficiente para un pájaro de tamaño medio, como un loro gris africano. Los pájaros más grandes que comen más grasa en la naturaleza, como los guacamayos, pueden tomar unos cuantos frutos secos al día, mientras que a los más pequeños, como las cacatúas y los periquitos, no hay que ofrecerles más que unas cuantas láminas de almendra o un trozo de nuez cada día. Anime a su pájaro a ser una máquina voladora magra, y limite los tentempiés grasos.

6. Huesos de fruta y semillas de manzana

Aunque la mayoría de las frutas son seguras y generalmente saludables para que las aves las consuman en pequeñas cantidades, ciertas frutas que contienen semillas (como las manzanas y las peras) y huesos (como las cerezas, los albaricoques, los melocotones, las nectarinas y las ciruelas), no deben ofrecerse a las aves sin quitarles primero las semillas y los huesos, ya que estas semillas y huesos contienen pequeñas cantidades de un compuesto cianuro cardiotóxico. Sin las semillas y los huesos, estas frutas son completamente seguras para las aves. Las semillas de otros productos como las uvas, los cítricos, la calabaza, las calabazas, los tomates, los melones, el mango, la granada y las bayas, todos son seguros para el consumo de las aves y pueden ser alimentados sin preocupación.

7. Cebollas y ajo

Mucha gente espera que las cebollas y el ajo, al igual que otras verduras, sean saludables para las aves. Sin embargo, mientras que estos vegetales picantes tienen beneficios para el corazón en las personas, ya sea alimentados crudos o cocidos, son tóxicos para muchos animales, incluyendo aves, gatos y perros. Las cebollas contienen compuestos de azufre que, al ser masticados, pueden irritar el revestimiento de la boca, el esófago o el buche de las aves, causándoles úlceras, y pueden inducir la ruptura de los glóbulos rojos, lo que provoca anemia. El ajo contiene alicina, otra sustancia química que puede provocar anemia y debilidad en las aves. Por lo tanto, condimente la vida de su pájaro con un pequeño trozo de pimiento picante rico en vitamina A en lugar de ajo y cebolla.

8. Xilitol

Este edulcorante artificial común, que se encuentra en los chicles sin azúcar y en muchos alimentos dietéticos, provoca hipoglucemia, daños en el hígado y una posible muerte en perros y otros animales. Aunque los efectos de este edulcorante no se han estudiado en detalle en las aves, éstas tienen un metabolismo más rápido que muchas otras especies y, por lo tanto, podrían ser muy sensibles a los efectos tóxicos de incluso pequeñas cantidades de esta sustancia química. Por tanto, es mejor evitar por completo la exposición de las aves al xilitol. No debe ofrecerse a los pájaros goma de mascar, ya que puede pegarse a sus plumas y piel, y los pájaros con sobrepeso deben ser alimentados con frutas y verduras bajas en grasa, en lugar de productos dietéticos, para ayudarles a perder peso. El xilitol puede ser una opción dulce en su plan de pérdida de peso, pero debe evitarse en la dieta de su pájaro.Una gran parte de la socialización de un loro es permitir que su pájaro salga de su jaula a la hora de comer, y ofrecerle una cantidad muy pequeña de comida mientras usted está comiendo puede ciertamente hacer que su pájaro sienta que es parte de la bandada. Recuerde que compartir alimentos que no hayan pasado por su boca (que contienen bacterias y levaduras ajenas a los pájaros) y que no sean tóxicos para las aves puede ser una buena forma de generar confianza con su mascota y hacer que se sienta cómoda en casa. Si su pájaro ingiere alguno de estos artículos potencialmente tóxicos, recuerde ponerse en contacto con su veterinario inmediatamente para ver si el tratamiento está justificado.

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