Al principio, la idea de participar en una terapia de grupo puede parecer intimidante. Quién quiere compartir su historia con extraños? Pero la terapia de grupo, en la que uno o varios psicólogos dirigen un grupo de 5 a 15 personas, puede ser muy beneficiosa. De hecho, «los participantes suelen sorprenderse de lo gratificante que puede ser su experiencia», dice Ben Johnson, PhD, ABPP, psicólogo clínico, director de Rhode Island Cognitive Behavioral Therapy and Coaching, y profesor clínico adjunto de la Facultad de Medicina Warren Albert de la Universidad Brown en Providence, R.I. «Soy una gran fan de la terapia de grupo»
Patti Cox, PhD, CGP, con práctica privada en Nueva York y presidenta de la Sociedad de Psicoterapia de Grupo del Este, una filial regional de la Asociación Americana de Psicoterapia de Grupo, dice que cualquiera puede beneficiarse de la terapia de grupo. «Lo importante es estar en el grupo adecuado en el momento adecuado», dice. «Una crisis aguda no es el mejor momento para empezar una terapia de grupo porque sus necesidades son muy grandes».»
Los grupos suelen reunirse una o dos veces por semana durante 90 minutos o dos horas. Cuánto quiere revelar la gente sobre sí misma es muy individual, pero hay seguridad en saber que lo que se dice en el grupo, se queda en el grupo.
Beneficios de la terapia de grupo
Así es como la terapia de grupo para el tratamiento de la salud mental puede ayudar:
Los grupos proporcionan apoyo. Escuchar a otras personas con problemas similares te ayuda a ver que no estás solo al tener desafíos, ya sea que estés lidiando con ataques de pánico, depresión u otro problema de salud mental, dice Johnson. Muchas personas experimentan una sensación de alivio.
Los grupos proporcionan una caja de resonancia. Si, por ejemplo, hablas de una pelea que has tenido con tu pareja, los miembros del grupo pueden ver cosas en la forma en que lo presentas que tú no ves. «Escuchar a otras personas sobre cómo te presentas puede ser muy poderoso», dice Johnson. «Obtienes una gama más amplia de perspectivas sobre tu situación, y eso puede ayudarte a lidiar mejor con tus problemas»
Los grupos pueden impulsarte hacia adelante. Escuchar cómo otros miembros superaron con éxito su miedo a volar o cómo se enfrentaron a un familiar por el abuso de drogas puede ser muy alentador. «Los pacientes suelen esforzarse más cuando ven lo que hacen los demás», dice Johnson.
Los grupos fomentan las habilidades sociales. «Los grupos no sólo ayudan a aliviar esa sensación de aislamiento, sino que también dan la oportunidad de practicar el reencuentro con la gente», dice Johnson. Al participar en un grupo, uno ve que puede llevarse bien con los demás.
La terapia de grupo cuesta menos que el asesoramiento individual. Algunas personas creen que, porque la terapia de grupo cuesta menos, no es tan buena, pero «ese no es el caso en absoluto», dice Cox. «La terapia de grupo puede ser increíblemente poderosa»
Los grupos te enseñan sobre ti mismo. «Cada persona del grupo sostiene un espejo y consigues verte a través de sus ojos», dice Cox. Es una forma de descubrir los puntos ciegos que pueden estar bloqueando tu capacidad para superar tus problemas.
Compartir puede ser curativo
Como muchas personas, Traci Barr, de 51 años, de Greenville, S.C., a quien se le diagnosticó trastorno bipolar cuando era adolescente, era escéptica de que pudiera beneficiarse de un grupo. Sin embargo, hace tres años, tras un intento fallido de suicidio, Barr acudió a la terapia de grupo mientras se recuperaba en el hospital.
«Tenía la mente mucho más abierta a ello porque, en ese momento, ya no tenía nada que perder», dice. «Iba a hacer todo lo que me dijeran los médicos, y los médicos me dijeron que me beneficiaría la terapia de grupo».
Sin embargo, enseguida Barr descubrió que las sugerencias que el grupo le ofrecía eran exactamente lo que necesitaba.
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«El grupo me ayudó sobre todo con las habilidades de afrontamiento», dice. «Aprendí cosas muy sencillas y muy efectivas: como qué son los límites y no permitir cosas en mi vida que no eran buenas para mi lado maníaco». Barr también descubrió que compartir su historia con los demás era «muy significativo y muy curativo»
La experiencia de grupo, dice Barr, «definitivamente me ayudó a superar el bache». A partir de ahí, dice, fue cuestión de construir sobre pequeñas victorias: pasar de no poder lavar la ropa a lanzar una nueva carrera como chef y ahora poder hacer presentaciones sobre alimentación saludable frente a grandes multitudes.
Cómo sacar el máximo partido al grupo
Intenta estos pasos para maximizar la terapia de grupo:
Toma un compromiso. Cada grupo debe hacer que los participantes firmen un contrato que explique lo que se espera de ellos, dice Cox. Saber esto puede ayudarte a superar cualquier miedo a participar.
Participa. Puede que haya días en los que no tengas ganas de hablar, y eso está bien, dice Cox, pero cuanto más contribuyas, más provecho sacarás.
Comparte. Tus experiencias pueden ser significativas para otra persona, y descubrirás que ayudar a los demás también te ayuda a ti.
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